¿POR QUÉ LOS MAESTROS ESTAMOS CALLADOS? ¿QUÉ PASO?
Cuando estudiamos la carrera docente, siempre alguien nos ha dicho en todo ese trayecto, ser maestros es ser “apóstol”, en consecuencia, estábamos advertidos enfrentar a una situación complicada, como es, ser maestro en una escuela pública con unas condiciones totalmente precarias (carencia de infraesctructura, mobiliarios, biblioteca, materiales educativos, sin programas de inducción o formación en servicio, etc.), encima con sueldos muy irrisorios que alcanzaba solamente (alcanza) el 30% de nuestra canasta familiar. Producto de este esta precariedad y abandono del estado nos hemos visto obligados a salir a las calles en muchas ocasiones, diríamos casi en cada régimen de turno reclamando no solamente aumento de sueldo, sino mayor inversión a la educación, de eso son testigos los últimos gobiernos, estamos hablando de los gobiernos de Fujimori, Paniagua, Toledo y García (los dos periodos).
No obstante, en
estos últimos cuatro años, específicamente en el presente régimen hay algo que
anda relativamente mejor, la incorporación de todo los docentes nombrados a la
Ley N° 29944, Ley de la Reforma Magisterial, que tiene como uno de los
objetivos “propiciar mejores condiciones de trabajo para facilitar el buen
desempeño del profesor en las instituciones y programas educativos”. En esta
línea se han establecido una Remuneración Integral Mensual (RIM), según la
Escala magisterial. Para ello en este año se han realizado dos procesos
excepcionales de evaluación de reubicación a escalas superiores (ascensos).
Esta evaluación ha sido dirigido a los docentes que provenían de la antigua y derogada Ley del profesorado, quedando así la ubicación de maestros en los primeros seis Escalas: I Escala, 136,666 docentes; II Escala, 75,182 docentes; III Escala 15, 790 docentes; IV Escala 18,745 docentes; V Escala 4, 496 docentes y VI Escala 370 docentes. Como se puede observar, el gran porcentaje de los docentes se encuentran ubicados en la I Escala, cobrando un irrisorio sueldo entre 1243 y 1555 nuevos soles, tal como establece el RIM., a estos sumaremos un promedio de 70 mil maestros que trabajan en situación de contrata, algunos por todo el año, otros por meses, sumado a la cantidad de docentes que se encuentran en la I Escala, estamos hablando un promedio de 200 mil maestros que trabajan con sueldos que no cubren la canasta familiar.
No se trata de mirar
solamente cómo estamos en los sueldos, sino alrededor de cuatro millones de
estudiantes están en manos de estos maestros, lo será por tres años
consecutivos tal como establece la ley, como sabemos, para muchos de nuestros
colegas, la actividad principal ya no es la docencia, sino mil oficios, en
consecuencia hay una brecha enorme, esto definitivamente seguirá afectando el
logro de los aprendizajes. No es hora de estar callados, tampoco es hacer una
huelga que es lo peor, sino busquemos la forma más adecuada para lograr que el
gobierno de turno o los que vendrán en el siguiente quinquenio asuman un
compromiso serio por mejorar las condiciones de vida de todos los maestros. Hay
pasos que se han dado, pero no es suficiente.
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