Como en la década del 1990 al 2000, nuevamente después de 20 años se implementa los despidos masivos de servidores públicos con el fin de reducir la planilla estatal, reducir trabajadores vía despidos masivos, descabezar sindicatos para luego desaparecerlos y privatizar los servicios que son derechos fundamentales del pueblo poniéndolos en bandeja a los grandes empresarios nacionales y del extranjero para consumar su plan económico. Es decir, está en camino un plan político y económico que incrementará el desempleo y la desocupación, incrementando el ejército de reserva industrial nunca antes visto en la historia de nuestro país.
Estamos pues ante un segundo genocidio laboral cuyo ciclo es de cada 20 años; no hace mucho se aprobó la Ley de Reforma Magisterial para despedir masivamente a maestros de la Ley del Profesorado con el método de evaluación tramposa, ilegal y punitiva; luego hace 15 días el Pleno del Congreso aprobó en primera votación el Proyecto de Ley Nº 1325 para despedir masivamente a los trabajadores de los Registros Públicos (SUNARP) también con el mecanismo de evaluación semestral; hoy pretenden aprobar el Proyecto de Ley Nº 1846-2012-PE Ley de Servicio Civil para despedir a cientos de miles de servidores públicos con el método de evaluación anual, teniendo en cuenta que el proceso de evaluación es un método caduco e inconstitucional que el propio Estado ha derogado con las Leyes 27487 y 27452 gracias a la lucha de miles de trabajadores despedidos comprendidos en la Ley Nº 27803 Ley de los Ceses Colectivos. Por estos hechos podemos constatar una línea de trabajo de despido masivos puesta en marcha por el Estado peruano, la misma que seguirá manifestándose por un largo tramo ligado al modelo neoliberal y a la gran y grave crisis del sistema capitalista.
El Estado lejos de restituir derechos de más de 300 mil despedidos de la década de los noventa, hoy pretende incrementar más ese ejército de desocupados proyectándose despedir a más de 500 mil entre maestros, trabajadores de Sunarp y servidores públicos y otros sectores que están en camino como de la Universidad Peruana, de las Fuerzas Policiales, del Poder Judicial y otros, ante la vista y paciencia del oportunismo vendeobrero de las cúpulas de centrales sindicales principalmente CGTP, que lo único que reclaman es su participación en las comisiones de evaluación para cumplir el papel de verdugos y practicar el clientelaje político y mercenario, tal como ocurrió en el tema de los Ceses Irregulares de la Ley Nº 27803.
En este sentido, el FUNETCINCENCES cierra filas por la defensa del régimen laboral estable para todos los servidores Públicos del Estado, contra la confiscación de sus derechos patrimoniales reconocidos en Ley por el propio Estado, contra la discriminación de lesa humanidad, por pensar distinto a los que gobiernan en este Estado y por la vulneración del nivel y grupo ocupacional reconocido; así firmemente invocamos a todas las fuerzas vivas a converger y salir unitariamente a luchar contra estas draconianas normas legales que se concretizan en un nuevo genocidio laboral, deponiendo actitudes de grupo y sectarios, y nuestra organización se suma desde tiempo atrás por la defensa de los derechos fundamentales del pueblo como son el derecho al trabajo, económico, salud, políticos, etc, todos ellos inherentes a la persona humana; por ello levantamos como lema lo siguiente:
¡¡Despedidos del Perú: Reposición, Nunca Más Despidos!!
¡¡Solidaridad de clase con todos los despedidos del Perú y el mundo entero!!
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